Una película de
Fernando J. León R.
HAROLD TORRES
JORGE ADRIÁN ESPÍNDOLA
LETICIA HUIJARA
HUMBERTO ELIZONDO
RAQUEL PANKOWSKY
JESÚS OCHOA
Actuación especial
Un inteligente y notable film
Hugo Lara. Correcámara
La desmitificación de la Revolución mexicana
Fernando J. León
Animal de un circo gringo diezmado, que simboliza el espejismo de los ideales de la revolución.
Leandro y Odón, dos jóvenes que quieren participar en la revolución mexicana con las tropas del General Obregón, viajan al norte en una cebra que se apropiaron de un circo diezmado, con la creencia adicional
de que es un caballo gringo. Durante el penoso viaje los asaltan otros revolucionarios, se escapan de un grupo de mujeres que querían esclavizarlos, se pierden en el desierto y van a dar con el general Quesada que pretende fundar una República nueva. Cuando por fin llegan con los obregonistas, un coronel cree que son espías de Pancho Villa y para probar su fidelidad
a Obregón, le piden a Odón que mate a Leandro.
Director | Nombre del director |
CINEMÁGICO PRODUCCIONESen coproducción conFOPROCINE Y ESTUDIOS CHURUBUSCO AZTECApresentan LA CEBRA
conHAROLD TORRES·JORGE ADRIÁN ESPÍNDOLA· LETICIA HUIJARA·HUMBERTO ELIZONDO·RAQUEL PANKOWSKY· ALEJANDRA LEY·JULIÁN VILLAGRÁN·MANOLO SOLO· GRACIELA OROZCO·PAULINA GAYTÁN· HÉCTOR HOLTEN ALEJANDRO CASO·RAÚL ADALID·HERMAN LÓPEZ TOMÁS ROJAS· Actuación especialJESÚS OCHOA·Diseño de producciónALISARINE DUCOLOMB· Dirección de arteSHANTAL FRANCESCHI· Edición OSCAR FIGUEROA· Diseño de sonidoMIGUEL ÁNGEL MOLINA· Música originalJULIO DE LA ROSA· Sonido directoPABLO TAMEZ· Diseño de vestuarioADOLFO CRUZ MATEO· Dirección de fotografíaMARTÍN BOEGE· CastingELVIRA RICHARDS· Postproducción CARLOS ESPINOZA
· Escrita porFERNANDO J. LEÓN R.· Productor ejecutivoALEJANDRO MÉNDEZ· ProducciónSOCORRO MÉNDEZ· DirecciónFERNANDO J. LEÓN R.
PROXIMAMENTE
Correcámara / Hugo Lara Chávez /Marzo de 2012
El cineasta Fernando Javier León debuta en el largometraje con La cebra, un curioso relato ambientado en la revolución mexicana, que resulta también una sátira corrosiva sobre la realidad social
y política del México contemporáneo.
La historia esta situada en 1915, un año crucial de la revolución a raíz del triunfo de Obregón sobre Villa en la batalla de Celaya, que determinó a los vencedores de esa
gesta. El filme narra la historia de dos jóvenes amigos campesinos (bien interpretados por Harold Torres y Jorge Adrián Espíndola) que deciden unirse a la lucha armada. En su camino se cruzan con un circo y se apoderan
de una cebra, aunque ellos piensan que se trata de un caballo "gringo". Así, echan a la suerte a cuál ejercito deben unirse, si al de Villa o el de Obregón. Finalmente se inclinan por éste ultimo y emprenden un
largo viaje por los paisajes desérticos del país, afectado por la guerra y la hambruna, donde se cruzan con distintos personajes extraños; un grupo de mujeres que los esclavizan; un ridículo y pequeño ejercito de
ocho oficiales, o una patrulla obregonista comandada por un sanguinario militar, entre otros.
La cebra resulta ser un inteligente y notable filme en varios sentidos. En primer término, el guion
escrito por el mismo director que muestra sus conocimientos en la escritura, pues anteriormente se había dedicado a esta disciplina y había escrito o coescrito El atentado (Jorge Fons,
2010), De la infancia (Carlos Carrera, 2007) y La ley de Herodes (Luis Estrada, 2000). La trama es muy solvente, con recurrentes guiños a La Odisea de Homero, que León traslada imaginativamente a la circunstancia mexicana, mediante personajes como el cíclope o las sirenas. Sus dos protagonistas resultan bien armados tanto por sus motivaciones interiores como
por las consecuencias que sufren a raíz de las decisiones que van tomando. Otros personajes resultan igualmente llamativos, como la mujer que interpreta Leticia Huijara o el general Quezada que encarna Elizondo,
jefe supremo del patético ejercito "quezadillista", en el que todos sus miembros llevan un apellido de los mas recientes presidentes de México, de Lopez Portillo a Calderón. Cabe mencionar también al general Obregón,
al que da vida Jesús Ochoa con su conocida simpatía y presencia.
Hay varios momentos y secuencias hilarantes (como el alucine del peyote o una sesión espiritista). El director logra explotar el humor y la sátira
a partir de lo que detona el absurdo de una cebra en el desierto mexicano, un absurdo que llega hasta nuestros días con los famosos y grotescos burros de Tijuana, pintados para los turistas como el equino africano,
emblema que funde lo pintoresco con la miseria.
Otros aspectos sobresalientes son la fotografía de Martin Boege y la dirección de arte de Alisarine Ducolomb, donde predomina una paleta de colores de tonos ocres,
con un registro de imagen poderoso a pesar de su sencillez, con una ambientación bien cuidada, incluso aun cuando la mayor parte de las acciones ocurren en locaciones desoladas.
Dentro del cine mexicano con temática
revolucionaria, "La cebra" viene a ocupar un sitio importante, por su agudeza y humor mordaz, guardando parentesco con Las fuerzas vivas (Luis Alcoriza, 1975) y con La ley de Herodes (2000) y El infierno (2010), ambas de Luis Estrada. Por las risas que se atoran en la garganta, su crítica política y su apuesta estética, La cebra puede llegar a ser uno de los
filmes mexicanos más interesantes de 2012. Ojalá la taquilla asi lo refrende, cuando le toque turno de su estreno comercial, aun sin fecha.
La cebra forma parte de los largometrajes de ficción
mexicanos que compiten en el Festival de Guadalajara.
IMCINE / Rosa Elena Velasco / 2012
Tras participar en Cannes en 1995 y escribir -o coescribir- guiones de películas como El Atentado (Jorge Fons, México, 2010), De la infancia (Carlos Carrera, México,
2010), El Atraco (Paolo Agazzi, Bolivia, 2004), El último tren, (Diego Arzuaga, Uruguay, 2002) y La ley de Herodes (Luis Estrada, México,
1999), Fernando León Rodríguez estrena su ópera prima, La cebra, en el FICG27.
En entrevista para IMCINE, Fernando explicó cómo ideó el proyecto de esta película: "Surge de dos ideas,
las historias que me contaba mi abuela sobre sus recuerdos de la revolución y, por otra parte, de una pregunta básica para la imaginación ¿Qué sucedería si.....?"
Se trata de la aventura de dos jóvenes, Leandro
y Odón, en la búsqueda de convertirse en obregonistas. Las andanzas comienzan con el encuentro de una cebra -que roban creyendo que un caballo gringo-, pasando por la experiencia con un grupo de mujeres que los
esclavizan, la integración a la cuadrilla de general Quesada -cuya intención es fundar una nueva República- y su involuntaria separación en el desierto; para lograr, finalmente llegar hasta las tropas de Obregón.
Pero este arribo no será lo que esperaban, porque un coronel sospecha de sus posibles vínculos con Villa y, para probar su fidelidad, ordenará a Odón que maté a su amigo.
Fernando León definió así la película:
"Una tragicomediacomicamágica no musical. Tiene de todo, excepto canciones rancheras (ups, miento, un personaje canta una cancioncilla ranchera. Pero como no es básica, por eso es no musical)".
"Ha sido
una experiencia muy interesante porque por primera vez soy el responsable total del resultado de un guión escrito por mí", agregó el cineasta.
La cebra es una producción de Cinemágico
Producciones con apoyo de FOPROCINE. Su director platicó cómo logró levantar el proyecto: "Aquí entra la productora Socorro Méndez, a quien le interesó el proyecto y confió en mí para pasar a la dirección y gracias
a que el guión fue ganando las diversas etapas y convocatorias de los apoyos que dan IMCINE e Ibermedia También nos echó la mano Mónica Lozano, para la post".
Fernando León es Licenciado en Comunicación,
pero su verdadera vocación creció bajo la tutela de Vicente Leñero: "Estudié comunicación en una Universidad privada de "alto prestigio" pero que en los hechos parecía que era como hacer Prepa II. Mi primer guión
lo escribí después de leer dos manuales de guión, pero donde realmente aprendí a escribir cine fue en el taller del Maestro Vicente Leñero". "Mi pasión por el cine creo que se debe a que mis papás eran muy cineros.
Había semanas que nos acabábamos la cartelera y un día -por ahí de la prepa- un amigo me llevó a un rodaje. Ahí me hice adicto a esta droga que es el cine. Una vez que lo pruebas, no puedes dejarlo", afirmó.
Fernando
ha escrito o coescrito numerosos guiones, ha adaptado por lo menos tres novelas y ha trabajado como script doctor y asesor para diversas compañías: Telsa (España), Pandora Films (Alemania), Tango Bravo
(Venezuela), Ventana Rosa Films (Estados Unidos), Televicine, Altavista Films, IMCINE y Argos (México); así como en proyectos específicos filmados internacionalmente: After (Alberto Rodríguez,
2009), Cabeza de perro (Santi Amodeo, 2006), 7 Vírgenes (Alberto Rodríguez, 2006), Mujeres desnudas persiguiendo a Ewan Mc Gregor (Santi
Amodeo, en preproducción).
Fue asesor creativo en el Laboratorio de guiones del Sundance Institute en 1999 y 2001; y en el taller "Desarrollo y Entorno-Fundación Contenidos de Creación" en colaboración
con el Festival de Cine Iberoamericano de Huelva, en 2002. Por lo que su fama de buen guionista es indiscutible, aunque él no se ostente de ello: "Pues así como que reconocido, reconocido, sólo en mi casa y en la
tiendita de la esquina. Y para consolidar una carrera, cualquiera que sea, pues se hace trabajando. En el guionismo se trabaja y doble. Es una chamba que te permite mucha libertad pero que también puede ser sufrida.
Lo digo por la seriedad o falta de ella de ciertos productores". "Cuando hice mi corto, hace un buen de tiempo, estaba más nervioso que el primer día de rodaje del largo. Entre uno y otro hay muuuchos años de diferencia.
Y el paso a mi ópera prima se debe, principalmente, al cansancio. Sí, al cansancio de que otros directores, como dice el clásico, no saben ni leer ni comprender la dramaturgia. Trabajé con un director que me dijo:
tú ahí pon lo que quieras, a mí nada más me importan los diálogos. Lo que tú escribes, no lo voy a hacer a la hora de filmar porque eso lo resuelvo en el set. Afortunadamente, en este caso, me corrieron y sólo me
dieron créditos en: diálogos adicionales. La película quedó como una telenovela. ¡Ojo! aclaro que también hay otros directores que, mis respetos, no sólo saben leer. ¡También escriben! Como es el caso del Maestro
Fons y del Presidente (de la AMACC) Carrera", explicó Fernando.
En 1995, Fernando León fue seleccionado en Cannes con su primer cortometraje La tarde de un matrimonio de clase media,
a los que hay que agregar los títulos de La muerte como un sueño (1992), Mi pollito de la feria (1995), La luna más grande de Saturno (1997) y Alias el gato (Falso documental 2006). "Siempre tuve intención de dirigir pero el camino me llevó a vivir de ser guionista, y el proceso (para dirigir La cebra) fue que coincidieron,
mi cansancio, el bicentenario de la revolución y que Socorro confió en mí", declaró.
La cebra se filmó en Tijuana, en las cercanías de Pachuca, San Miguel Allende y la frontera entre
Puebla, Tlaxcala y Veracruz. "Pues el proceso, para mí, fue muy divertido. Tuve la fortuna de rodearme de personas más inteligentes que yo. Por ejemplo, con mi niña Alisarine (Ducolomb; la directora de arte) que
con sólo cruzar una mirada entendió lo que yo quería. O con Martín Boege, un tipazo de fotógrafo". Respecto a lo que espera que el público encuentre en su película, Fernando comentó: "Quisiera que se divirtieran,
se rían y que al salir de la peli, entre el factor taco de manera positiva. Sí, que cuando sales del cine y te echas uno tacos, mientras esperas a que te los sirvan o te los comes, hables de la peli. Si después
de ver una peli, y en el factor taco hablas sobre si el América metió gol o no..... uff. El factor taco es negativo. Así que por mí, cuatro de suadero y factor taco positivo".
La cebra se exhibe en el FICG27, donde compite en la sección oficial de largometraje mexicano. El director habló del significado de su participación en esta competencia: "Antes que nada una enoooorme alegría. El Festival
es como el padrino de la peli. Socorro lo metió al encuentro de coproducción y el proyecto ganó el Premio Churubusco. Después, en el Guadalajara Construye, ganamos dos apoyos más para la post. Así que el
buen cierre de la peli es que esté en el Festival. Es como la coronación".
Finalmente, Fernando habló de su trabajo actual y sus próximos proyectos: "Estoy escribiendo un guión y una serie de tele. El guión es
sobre un beisbolista que llega a casi jugar en las grandes ligas pero que no lo logra porque el destino es cruel. Y la serie de tele es muy divertida. Es de terror y está basada en una novela de mi amigo Enrique
Rentería".
Fernando J. León. R / 2012
El partido político hegemónico que se instaló durante 70 años en el poder presidencial ha usado la ideología de la revolución mexicana como justificación para sus propósitos políticos y utilizado al arte para su
mitificación. Curiosamente, esta deformación eligió como héroes a los vencidos —Madero, Zapata y Villa— y no a los hacendados vencedores como Obregón, Calles y De la Huerta. Por esta razón el cine mexicano ha narrado
la revolución mexicana de manera idealista y casi siempre en el marco del melodrama. Sus personajes son seres que luchan por tierra y libertad o que prefieren morir por uno de los héroes vencidos, como en las películas
del desencanto revolucionario de Fernando de Fuentes, o bien como escenario para el heroísmo amoroso de las peliculas del Indio Fernández. Quizá sólo “Reed, México Insurgente” de Paul Leduc, critica a la revolución
mexicana, pero lo hace desde la toma de conciencia social de un periodista norteamericano.
Opuesto a todo lo anterior, la particularidad de la La cebra está en la expresión, desde
una óptica más abierta, de las otras razones por las que dos personas se involucran en una guerra civil: el hambre y la búsqueda de satisfacciones más simples, necesarias y universales para el ser humano.
¿Otro
film de la revolución mexicana? Sí, pero La cebra es la película sobre la revolución que la desmitifica; narra la visión cercana a los héroes anónimos que fueron los revolucionarios mexicanos
y manifiesta ideas pocas veces tratadas en el cine nacional sobre ese acontecimiento histórico que dio inicio al sistema político mexicano que gobernó al país mediante un solo partido político de 1928 al 2000. La cebra es
una película cercana a “La ley de Herodes” de Luis